Un mes después de la declaratoria de muerte cruzada, los pronósticos positivos y negativos sobre los efectos que tendría la medida no se han cumplido. No hubo manifestaciones, pero tampoco se avizora un aceleramiento en las metas del Ejecutivo. La ciudadanía continua su día a día, como si no se hubiese disuelto la Asamblea Nacional. Y las elecciones extraordinarias avanzan, pese a los inconvenientes y cortos plazos. Lo único que ha tomado por sorpresa al país son los efectos de las fuertes lluvias. El panorama para el Ejecutivo tampoco es el que anunció el presidente Guillermo Lasso. Pese a no tener a su contraparte política, el Legislativo, ahora el ‘obstáculo’ que debe sortear es la Corte Constitucional (CC). 

Fuente: Primicias.