A partir de junio de este año, importadores de bienes, agentes de aduana, empresas de servicios de transporte de valores y especies monetarias y quienes se dedican a la venta, cesión o transferencia de cartera, estarán obligados a emitir facturas electrónicas al ofrecer sus servicios. Las pequeñas empresas (que facturan de $ 100.001 a $ 1’000.000) se incorporarán a este proceso desde el 1 enero de 2019. La facturación electrónica, impulsada por el Servicio de Rentas Internas (SRI), tiene ventajas tanto para la administración tributaria como para el contribuyente. Fuente: El Telégrafo.

Last modified on 2018-02-06