La calificadora de riesgos Fitch ratificó la calificación de riesgo de Ecuador en B-, pero con posibilidad de mejora. Según la firma, un eventual ajuste dependerá del grado de ejecución del plan económico del Gobierno. En septiembre de 2020 la firma había subido la calificación de Ecuador a B- desde “default restringido”, tras la renegociación de los bonos externos. Hay cuatro factores detrás de la reciente mejora en la perspectiva: un bajo riesgo de no pago de la deuda en el corto plazo, un plan de políticas económicas a mediano plazo, el apoyo del FMI y un progreso a nivel macroeconómico junto a un plan de reformas estructurales. Una eventual revisión de la calificación de riesgo, según Fitch, necesitará de la respuesta del país a cuatro retos. Primero, dice, Ecuador necesita de un nuevo plan de crecimiento económico. Fuente: El Comercio.