Fitch Ratings subió la calificación crediticia de Ecuador a “B-” desde “default restringido”, reflejando la finalización de un “canje de deuda en dificultades” que según la agencia parece haber sanado el evento de moratoria iniciado por la “solicitud de consentimiento” en abril. Fitch afirmó que espera que, tras las próximas elecciones de 2021, cualquier gobierno tendrá los incentivos para honrar el acuerdo de deuda. Pero advierte que “los riesgos electorales plantean una incertidumbre significativa sobre los compromisos” adquiridos bajo una línea de financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el apetito por reformas y un ajuste fiscal. Fuente: Primicias.

 

Last modified on 2020-09-04