La exportación de flores ecuatorianas intentaba recuperarse tras una serie de protestas que paralizaron a Ecuador en octubre de 2019, cuando la pandemia del nuevo coronavirus azotó al país. La situación provocó la cancelación del 60% de los pedidos y una incertidumbre de la que aún no se sabe cómo salir. Hasta el año pasado, esta actividad representaba el cuarto rubro de exportación de productos no petroleros. Alejandro Martínez, presidente de ese gremio, dijo a The Associated Press que “es una situación crítica, el peor golpe que ha vivido la floricultura ecuatoriana” y aseguró que las pérdidas entre marzo y junio suman unos 130 millones de dólares. Además, explicó, se perdieron unas 10 000 fuentes directas de empleo y unas 6.000 indirectas de un total de 120 000 plazas. Fuente: El Universo.

Last modified on 2020-08-31