Las cifras justifican las decisiones de política económica que trata de implementar el gobierno de Lenín Moreno. Entre enero y agosto de 2020, afectado por la crisis financiera derivada de la emergencia sanitaria por el COVID-19, el Estado desembolsó 1.741 millones de dólares para comprar derivados de crudo para el uso de los ciudadanos. La cifra corresponde a la compra en el exterior de más de 32 millones de barriles de derivados como Diésel, Gas Licuado de Petróleo, Naftas, entre otros. Según el reporte mensual de la empresa pública Petroecuador, el monto total de las importaciones representa una reducción si se compara con los primeros ocho meses de 2019. En ese periodo, el gasto fue de 2.865 millones de dólares. Fuente: Expreso

Last modified on 2020-09-28