En las últimas décadas, Ecuador pasó de ser un importante productor de café en grano a especializarse en la industrialización de café soluble o instantáneo. La limitada producción agrícola de café en el país provocó que esta industria se abastezca cada vez más con café en grano importado. Según la Asociación Nacional Ecuatoriana de Café (Anecafé), Ecuador produce al año alrededor de 250.000 sacos de café de 60 kilos, en sus dos variedades: arábiga y robusta. Esta cantidad no abastece la demanda interna, que es de unos 300.000 sacos al año. La producción de café ha ido cayendo con los años. Hace una década, era de 600.000 sacos anuales y en los noventa rondaba los 1,5 millones de sacos. Con esta disminución de café en grano nacional, la industria de soluble se vio desabastecida y empezó a traerlo de países como Vietnam y Brasil. 

Fuente: Primicias.